Eso es lo que todos buscamos, algo que creemos todos que tenemos pero solo es apariencia, algo transparente, pero que se vuelve inerte cuando llega la realidad, es absolutamente falso en el concepto y engañoso en la práctica.
Se nos hace ver a todos que somos miembros diferentes, cada uno con su personalidad, pero en realidad esa personalidad es confundida por otros que no la entienden, que no la comparten, o simplemente que no la aceptan. Por eso cada uno debe ser como piensa, no como cree que debe actuar en cada momento dependiendo de cada situación. Las personas somos simples, pero debemos mantener nuestros principios para ser algo en la vida.
Creemos que lo tenemos todo, pero eso es simplemente una utopía, es algo imposible, pues no podemos coincidir en aspectos que nos marcan y hacen que se compliquen las cosas a la hora de limar asperezas. Buscamos un destino, pero a menudo no nos damos cuenta que el destino nos lo marcan quienes tenemos alrededor y que de ningún modo, si tu personalidad se resiente, habrá una salida fácil, pues todo lo que tenías habrá dado la vuelta de repente.
Por eso es el momento de reflexionar si somos sinceros, algo que nos honraría pero que muchas veces no es fácil. Hay que aceptar la realidad y punto y echarle cojones que la vida son dos días.
Venga nenes a vivir en paz.
